Los contratos de obra y servicio, son generados cada mes a nivel nacional con un alto porcentaje. Para detener esto y fomentar la creación de empleos indefinidos, el Ministerio de Trabajo propone su eliminación tras 3 años de su prohibición.
De este modo transcurridos esos tres años, la empresa no podrá firmar ese tipo de contratos con el trabajador.
Para el que no estéis muy familiarizados con este término, los contratos de obra o servicios son aquellos que s realizan a un trabajador para realizar una obra o un servicio de una duración determinada. Suele utilizarse en el sector de la limpieza y construcción.
A partir del 2021, dichos contratos se eliminarán en tres años tras su prohibición.
Esta medida pretende eliminar el uso abusivo de los contratos por obra y servicio. El Gobierno propone una transición para las empresas y estos contratos, pretendiendo eliminar el uso persistente de este tipo de contratos para el empleado que desempeña el mismo puesto de trabajo una y otra vez.
El Gobierno opta por el contrato fijo-discontinuo, para de ese modo eliminar la contratación por obra y servicio y bajar los niveles de eventualidad.
Cuando un empleado es contratado de manera reiterada en una misma empresa, los empresarios suelen optar por un trabajador fijo-discontinuo. De ese modo, el contrato se realiza por intervalos temporales separados pero reiterados en el tiempo de manera periódica.
Existe otro tipo de contrato, con la que empresario recibirá ayuda para contratar, el contrato de formación. Este tipo de contrato permite bonificarse a la empresa el total de los seguros sociales.
El empleado que es contratado bajo este contrato se formará a la vez que trabaja, lo que implica un gran beneficio para la empresa, ya que dicho trabajador, una vez finalizada su formación será un trabajador más cualificado y preparado.
Para que una empresa pueda acogerse a esta modalidad de contrato, deberá estar al corriente con sus pagos en la Seguridad Social y Hacienda y no haber sido sancionado.
Del mismo modo, la empresa debe comprometerse a cumplir los requisitos y condiciones de dicho contrato.